El 16 de marzo de 1933 nace en la madrileña calle de San Isidro Labrador en el barrio de La Latina, la Mezzosoprano Teresa Berganza. Fue una de las voces líricas mas importantes de España y considerada una de las grandes de la Opera a nivel mundial.
En el número 13 de la calle de San Isidro Labrador, en el barrio de La Latina, hay un placa de recurda que: “en esta casa nació en 1933 la cantante Teresa Berganza que con su voz y arte ha paseado Madrid por el Mundo.” Reconocida como una de las mezzosoprano mas importantes de su época, tubo a lo largo de su vida, una destacada carrera en el mundo de la ópera y la música. clásica.

Los primeros años
Teresa Berganza es la más pequeña de los tres hijos del matrimonio formado por Guillermo Berganza y María Ascensión Vargas. A pesar de que su padre era un hombre de izquierdas y ateo y su madre monárquica y católica, la cantante siempre presumía de que en su casa reinaba el amor y el respeto.
En el discurso de ingreso a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Berganza recuerda así a sus padres: “De mi madre recibí firmeza en el carácter, voluntad de ser. A mi padre, Guillermo, debo la devoción por el arte. El tenía alma de artista.”
Su padre, por el que sentía gran devoción, le inició en el mundo del arte. Los domingos asistían a los conciertos que la banda municipal ofrecía en el Parque del Retiro, o aprovechan para visitar el Museo del Prado. En casa, Guillermo interpretaba al piano, piezas de Mozart o Beethoven. En esta época empieza a surgir en Teresa el amor por la música.

Los años de estudio
Inicia su educación en la Escuela Fundación Vázquez de Mella, a la vez que comienza sus estudios de música en el Conservatorio de Madrid. En aquellos años no pensaba dedicarse al canto ya que su verdadera pasión era el piano.
Fue se profesora de canto y técnica vocal, la que vió que Teresa tenía voz de mezzosoprano y que estaba llamada a seguir por ese camino.
En 1953 se gradúo en el conservatorio obteniendo el Premio Fin de Carrera. Gracias a una beca del Ministerio de Educación, viaja a Austria para seguir con su formación.
Resulta curioso que en aquellos años acompañara en varias ocasiones a cantantes con voces tan distintas como Carmen Sevilla o Juanito Valderrama. También grabo algunas bandas sonoras de películas de la época como La Hermana San Sulpicio.

Una larga carrera
Es en el año 1956 cuando Teresa Berganza debuta como profesional en el Ateneo de Madrid. Mas tarde lo hace en París, en el Teatro de los Campos Elíseos, junto con el director de orquesta Ataúlfo Argenta, con un programa de Manuel de Falla.
El año 1957 marca un hito su carrera. Se presenta en el Festival Internacional de arte lírico de Aix-en-Provence, en Francia. Con un repertorio basado en operas de Mozart y Rossini, como “El Barbero de Sevilla”, “Las noches de Fígaro” o la menos conocida “Cosi Fan Tutte” con la que debuta.
Obtiene un éxito rotundo. El público la aclama y la prensa especializada la califica como la mezzosoprano del siglo. Le llueven los contratos y arranca una exitosa carrera que la llevará a cantar a los escenarios más prestigiosos del mundo.
Debuta en los principales teatros de ópera como la Scala de Milán, El Royal Opera House de Londres o el Metropolitan Ópera House de Nueva York.
A lo largo de su carrera, interpretó numerosos papeles destacados en óperas de compositores como Mozart, Rossini, Verdi, o Bizet. Su voz y su técnica vocal excepcional la convirtieron en una de las mezzosopranos más importantes de su generación.
Profeta en su tierra.
De Teresa Berganza, no se puede decir que no fue profeta en su tierra. A lo largo de su dilata carrera, recibió más de cien más condecoraciones. Entre ellas la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes de 1982. En el año 1991 recibe conjuntamente con Victoria de los Ángel, Montserrat Caballé, Pilar Lorengar, José Carreras, Alfredo Kraus y Plácido Domingo, el premio Príncipe de Asturias de las Artes

El jurado destaca que “los intérpretes que, colectivamente, reciben este Premio, personifican con su inmenso talento musical un momento de excepcional brillantez de nuestra lírica, proyectando universalmente el nombre de España y propiciando un creciente amor por la música en el conjunto de la sociedad”
El 5 de marzo de 1995, ingresa en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, convirtiéndose en la primera mujer Académica de Número en conseguirlo.
Fuera de España, Teresa Berganza, también recibió el reconocimiento a toda su carrera con distinciones como la Insignia de Caballero de la Orden Nacional de la Legión de Honor francesa, o el Premio Internacional de la Ópera por su trayectoria, que le fue entregado en Londres en el año 2018.
La etapa final
En 2008 Teresa Berganza se retira de los escenarios, aunque participa en algunos conciertos. Es mismo año fue nombrada profesora titular de la Cátedra de Canto en la Escuela Superior de Música Reina Sofía. Es en 2013 cuanto se retira definitivamente como cantante y profesora.

El 13 de mayo de 2022 fallece en su casa de San Lorenzo del Escorial. Un año mas tarde, el Ayuntamiento de Madrid la homenajea poniendo el nombre de Plazuela de Teresa Berganza al espacio situado a la entrada del Teatro de la Zarzuela en la calle de Jovellanos.